NTN24
Política

Bolivia exigió a EE. UU. y Brasil no intervenir en su política interna tras detención de Áñez

Áñez fue detenida la semana pasada acusada de sedición, terrorismo y conspiración por el supuesto golpe de Estado en 2019

Bolivia pidió este jueves a Estados Unidos y Brasil "no intervenir" en sus asuntos internos, luego de que esos países expresaran preocupación por la encarcelación de la expresidenta de derecha Jeanine Áñez.

La cancillería boliviana informó en dos comunicados que había tenido reuniones separadas en La Paz con diplomáticos de Estados Unidos y Brasil y les recordó los acuerdos internacionales que llaman a los países a no intervenir en materias de "jurisdicción interna" de otras naciones.

DE INTERÉS: "Preocupación" en Brasil por detención de expresidenta de Bolivia, Jeanine Áñez

A la encargada de Negocios de Washington en La Paz, Charisse Phillips, le "recordó el deber de abstenerse de intervenir en asuntos internos" de Bolivia, y al embajador brasileño, Octavio Henrique Días, la "no intervención" en los procesos judiciales en marcha, según los textos.

Áñez fue detenida la semana pasada acusada de sedición, terrorismo y conspiración por lo que su antecesor y rival Evo Morales denuncia como un "golpe de Estado" en su contra. 

El Departamento de Estado había expresado "preocupación" por el arresto de Áñez, mientras que el presidente brasileño, Jair Bolsonaro, había llamado a que "el Estado de derecho sea plenamente respetado en Bolivia".

Rechazo general a detención de Áñez

Más: Opinión | Bolivia: del golpe-ficción al auto-golpe; por Héctor Schamis

La Organización de Estados Americanos (OEA) y la Unión Europea también han pedido respeto a las garantías judiciales y transparencia en el proceso.

La Paz criticó el miércoles al secretario General de OEA, Luis Almagro, por plantear que se lleve el caso boliviano a la Corte Penal Internacional (CPI) de La Haya.

La exmandataria conservadora, de 53 años, y sus exministros de Justicia y Energía fueron encarcelados el fin de semana pasados como parte de una investigación en un supuesto derrocamiento del presidente izquierdista Evo Morales.

Tras las protestas que siguieron a su polémica reelección en octubre de 2019, la Policía y las Fuerzas Armadas hicieron un llamado para que Morales diera un paso al costado, lo que obligó al mandatario a dimitir y a salir del país.

Áñez, entonces segunda vicepresidenta del Senado, asumió la presidencia.

La exmandataria cumple prisión preventiva de cuatro meses en una prisión de mujeres de La Paz, donde el miércoles sufrió una descompensación de la que fue tratada en el interior del presidio.

Redacción AFP


Programas


Ver más

Especiales

Ver más