Patrimonio de la humanidad
El archipiélago chileno de Madre de Dios, ubicado en el extremo patagónico de este país, posee características especiales, diferentes a las que hay en cualquier otro ecosistema: Formaciones de roca caliza alrededor de la isla, bosques magallánicos, la caverna más profunda del país, así como lluvias extremas y vientos que hacen del lugar un atractivo único.
El paraíso que dejó de ser habitado hace más de 6.000 años, posee gran variedad pinturas rupestres y restos de la cultura ancestral de los Kawésqar, hoy en día busca convertirse en Patrimonio Natural de la Humanidad por la UNESCO.
Felipe Ward, Ministro de Bienes Nacionales de Chile asegura que “hay muchos lugares que han sido declarados patrimonios de la humanidad, pero en Chile ninguno dentro de la categoría natural".
El gobierno chileno espera lograr su cometido a través de la nominación del archipiélago y sea no solo un paraíso geológico para sus connacionales, sino para la humanidad.
REDACCIÓN CLÍ-MAX.
