¿Qué esperar de la reunión entre mandatarios de Panamá y Costa Rica para hablar de migración?
Panamá y Costa Rica ultiman los detalles de la visita de sus presidentes al Darién.
Será este viernes cuando Laurentino Cortizo recibirá a su homólogo tico, Rodrigo Chaves, para conocer la inhóspita jungla que conecta el sur de Centroamérica con Colombia y que es escenario de una crisis migratoria sin precedentes.
Esa zona selvática es atravesada por miles de migrantes que emprenden camino por Panamá y Costa Rica buscando llegar a Estados Unidos.
Según datos oficiales panameños, más de 390.000 personas han cruzado el Darién este año, y se espera que este 2023 se alcance una cifra récord no vista antes.
Panamá y Costa Rica aplican una estrategia de flujo controlado, que implica que los migrantes deben tomar buses en sus fronteras, que deben sufragar los propios viajeros, para ser llevados directamente a los límites con Costa Rica, en el caso panameño, y con Nicaragua, en el caso tico.
Ambos países han pedido reiteradamente apoyo a otros Estados sudamericanos para que asuman este problema desde una óptica de co-responsabilidad, administrando mejor los flujos de las personas que salen de sus países para evitar las astronómicas cifras a las que está llegando ahora la migración.
En una reciente visita a Washington del presidente Rodrigo Chaves, la Administración Biden comprometió 24 millones de dólares de ayuda para Costa Rica.
Ayudas similares han sido anunciadas en los últimos meses, además de cambios en la política migratoria de Estados Unidos, con la apertura de oficinas locales así como amparos migratorios para dar oportunidades a los que llegaron.
¿Qué esperar de esa visita?
Roger Pardo-Maurer, analista político y experto en temas de Seguridad y Defensa, ofreció una entrevista en Cuestión de Poder de NTN24.
