Esposa del líder opositor José Daniel Ferrer lo visitó en medio de denuncias de torturas por parte del régimen cubano
Este martes se conoció que el régimen de Miguel Díaz-Canel le permitió a Nelva Ismarays Ortega-Tamayo, visitar a su esposo, el líder opositor cubano José Daniel Ferrer.
La visita de Nelva se da en medio de las denuncias sobre las nuevas torturas a las que ha sido sometido José Daniel Ferrer en la prisión Mar Verde.
Nelva pudo constatar ella misma las condiciones en las que se encuentra su esposo, quien adelanta una huelga de hambre desde finales de junio.
Según ha informado Ana Belkis Ferrer, hermana del líder opositor cubano, alrededor de las 4:00 de la tarde “dieron fe de vida de Ferrer”.
“Durante el encuentro, de aproximadamente una hora, confirmó que todo continúa igual excepto las salvajes golpizas y las torturas extremas, las cuales de momento recesaron”, añadió.
Esta visita, que duró una hora, llega tres días después de que el Gobierno de Estados Unidos pidiera noticias sobre el estado de salud del dirigente cubano.
La visita, supervisada por Julio Fonseca, un agente de la Dirección de Inteligencia del régimen cubano, reveló que las golpizas han cesado, pero las condiciones de detención siguen siendo inhumanas.
Se ha denunciado que el activista sufre dolores continuos de cabeza, garganta y articulaciones, además de problemas graves en los oídos, mientras que sufre de deshidratación debido a la ingesta de agua contaminada.
Luis Enrique Ferrer, hermano del activista, alertó que estas condiciones suponen un riesgo serio para su vida. "Su situación en prisión es precaria, con cero atención médica y restricciones que limitan recibir agua potable", dijo.