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San Vicente del Caguán

Procuraduría ordena una indagación previa contra ministros del Interior y de Defensa en Colombia

Procuraduría ordena una indagación previa contra ministros del Interior y de Defensa en Colombia
Ministros de Defensa, Iván Velásquez (derecha), y del Interior, Alfonso Prada (izquierda) de Colombia. (EFE)
La indagación se da con relación al actuar de los ministros frente a la situación de orden público que se presentó en San Vicente del Caguán.

La Procuraduría General de la Nación de Colombia ordenó que se abra una indagación previa contra los ministros de Defensa, Iván Velásquez, y del Interior, Alfonso Prada, por sus actuaciones frente a la situación de orden público que se vivió la semana pasada en el municipio de San Vicente del Caguán, Caquetá, en donde fueron secuestrados 78 policías y seis civiles. 

El ente indicó a su vez, mediante un documento, que se practicará inspección disciplinaria al Ministerio de Defensa y al Ministerio del Interior “con el fin de obtener copia de todos los documentos, correos electrónicos y órdenes impartidas con relación a la situación de orden público que se presentó en el municipio”.

“De igual forma se verificará si (los) Ministerio(s) tenía(n) información previa relacionada con estos hechos, tales como informes de inteligencia de alguna de las Fuerzas Militares o de la Policía Nacional”, mencionó.

Ordenó unas medidas similares, a su vez, en contra de la inspección disciplinaria a la Dirección General de la Policía Nacional y el Comando del Ejercito Nacional.

VER TAMBIÉN: Liberan a policías y civiles secuestrados en Caquetá, Colombia

Los secuestros se produjeron tras la incursión de varias personas al lugar donde opera la empresa petrolera Emerald Energy en la vereda Los Pozos de San Vicente del Caguán.

El grupo de campesinos exigía desde hace varios meses la pavimentación de 40 kilómetros de una vía que prometieron las autoridades locales y la compañía petrolera. Las protestas escalaron y terminaron en fuertes enfrentamientos entre campesinos de la zona y miembros de la fuerza pública.  

No obstante, la situación se salió de control tras la muerte de un uniformado y un civil en la zona. Posteriormente, un grupo de al menos 78 policías y seis civiles fueron secuestrados por parte de los campesinos. 


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