Tres décadas de trabajo dan fruto con la recuperación de la Águila harpía en Venezuela
Blanco, quien también es el director del programa de preservación de este animal en ese país suramericano explicó que las principales amenazas para la especie están relacionadas con la degradación de los ecosistemas, el cambio de uso de la tierra, principalmente originado por la minería, la extracción maderera, las expansiones agropecuarias y el cambio climático que están afectando la biología y ecología de esa ave rapaz.
El experto resaltó además la importancia que tiene este plumífero y su relación a lo que los estudiosos consideran como un indicador de salud de los ecosistemas. Agregó, que donde esté el águila harpía, los componentes biológicos como no biológicos se encuentran de forma estable como faunísticos, botánicos, producción de oxígeno y de agua.
“Nuestro trabajo está orientado, primero, a establecer estrategias de conservación con el monitoreo permanente de los nidos que hemos conseguido a través de 30 años y también con la ubicación de nuevos territorios, de nuevos nidos del águila”.
El director del programa de conservación del águila harpía indicó que en la reserva natural Imataca hay 162 nidos y cada uno representa una pareja diferente.