Una popular profecía plantea un escenario apocalíptico alrededor de la elección de un nuevo papa

Las profecías de Nostradamus continúan generando interés y controversia en la era moderna. Una de sus predicciones más discutidas se refiere a un supuesto escenario apocalíptico que involucra al Vaticano y a la Iglesia Católica tras la muerte de un papa.
Es por esto que tras la muerte del papa Francisco el pasado 21 de abril y en el contexto del cónclave que inicia este 7 de mayo para elegir a su sucesor, las interpretaciones de algunos de los textos de este célebre astrólogo francés del siglo XVI han vuelto a despertar interés.
Según interpretaciones modernas de los escritos de Nostradamus, una etapa turbulenta iniciaría con el fin de un pontificado y la posterior elección de un "papa negro", que luego sería asesinado. Este evento supuestamente desencadenaría una invasión musulmana en Occidente, afectando específicamente a la Iglesia Católica.
La profecía continúa describiendo un ataque a Roma por parte de potencias orientales, utilizando armas destructivas que provocarían incendios y enfermedades.
El papa resultante sería herido, capturado y obligado a huir de Italia, estableciéndose temporalmente en Francia. Este periodo de agitación supuestamente llevaría a una división dentro de la Iglesia Católica, con los cardenales supervivientes eligiendo a otro pontífice regente en Italia.
La predicción sugiere que la Santa Sede se trasladaría debido a la inestabilidad, con un intento fallido de instalarse en Avignon. Finalmente, el papa encontraría su destino en Lyon, donde enfrentaría un atentado.
Sin embargo, es crucial destacar que las profecías de Nostradamus son ampliamente consideradas como ambiguas y sujetas a múltiples interpretaciones. No existe evidencia concreta que respalde la exactitud de estas afirmaciones en un contexto histórico o futuro real.
La credibilidad de tales predicciones y sus supuestas conexiones con eventos futuros permanece cuestionable y es un tema de debate entre historiadores y estudiosos. Muchos argumentan que la naturaleza vaga y criptográfica de los escritos de Nostradamus permite que sean adaptados a casi cualquier evento histórico o contemporáneo.