El tenis revoluciona el arbitraje: así funciona la nueva jerarquía entre los sistemas electrónicos del deporte blanco

Oro, plata o bronce: a partir de ahora, los organismos rectores del tenis mundial clasificarán los distintos sistemas de arbitraje electrónico en categorías separadas según su fiabilidad, anunció el miércoles la Federación Internacional de Tenis (ITF).
El arbitraje electrónico en directo, que se utiliza desde hace varios años en los torneos disputados sobre pista dura, se extendió en 2025 a la mayoría de los torneos ATP sobre tierra batida, suscitando a veces críticas de jugadores como el número 3 del mundo Alexander Zverev a raíz de decisiones controvertidas.
En hierba, la edición de 2025 de Wimbledon fue la primera que se jugó sin jueces de línea, que fueron sustituidos por un sistema de arbitraje electrónico cuyos anuncios teóricamente no pueden ser impugnados por los jugadores ni anulados por el árbitro.
En la nueva clasificación anunciada el miércoles, "los sistemas etiquetados como 'oro' están destinados a ser utilizados en los torneos de Grand Slam, WTA y ATP, la Copa Billie Jean King y la Copa Davis", explicó la ITF en un comunicado.
Los sistemas de arbitraje electrónico de nivel plata podrán utilizarse en el "segundo nivel" del circuito mundial, por ejemplo, en los torneos de la ITF, mientras que los de nivel bronce se emplearán en las competiciones de ámbito nacional.
En la actualidad, cuatro sistemas (Hawk-Eye, Foxtenn, IMGA ELC y Sentinel) tienen la etiqueta oro, dos plata (PlayReplay, Zenniz Smart Court) y ninguno bronce.
"Los principios por los que se evalúan los sistemas —precisión, fiabilidad, idoneidad para el propósito y practicidad— son idénticos en las tres categorías", dijo la ITF.
"Los nuevos procedimientos unifican el enfoque" de los siete organismos rectores del tenis (Open de Australia, Open de Francia, Wimbledon, US Open, ITF, ATP, WTA) "en la evaluación y supervisión continua de los sistemas de arbitraje electrónico en directo", añadió.
Las nuevas categorías "responden a la creciente demanda de arbitraje electrónico por parte de jugadores y torneos", "al número cada vez mayor de empresas que ofrecen estos sistemas de arbitraje (...) y a nuestro deseo de garantizar que la tecnología cumple las normas más estrictas", según Stuart Miller, director ejecutivo de Integridad y Asuntos Jurídicos de la ITF.
A principios de julio, en Wimbledon, los octavos de final entre la británica Sonay Kartal y la rusa Anastasia Pavlyuchenkova se vieron empañados por un grave error en el arbitraje electrónico, que los organizadores atribuyeron al día siguiente a un "error humano".
En esa ocasión una pelota de Kartal cayó detrás de la línea de fondo, pero el sistema de arbitraje automático no señaló "fuera".
El juez de silla prefirió repetir el punto en lugar de concedérselo a Pavlyuchenkova, para gran disgusto de la rusa, que sin embargo ganó el partido.
Unas pruebas más amplias y colaborativas, así como el intercambio de resultados, garantizarán la rendición de cuentas de los sistemas y unos altos estándares de ejecución del sistema de clasificación electrónica (ELC) en todo el calendario tenístico.
Implementado por primera vez como un experimento durante las Next Gen ATP Finals en Milán en 2017, ELC se adoptó más ampliamente durante la pandemia de COVID-19 antes de usarse finalmente en todos los eventos ATP Tour a partir de este año.