"Entramos a la Ruta de la Seda": Colombia firmó acuerdo con China que para el presidente Petro "cambia" la "historia" de sus relaciones exteriores
Colombia firmó este miércoles un acuerdo con China para sumarse a la Iniciativa de la Franja y la Ruta, un multimillonario programa de Pekín para financiar inversiones de infraestructura en otros países y acrecentar su influencia global.
"Ya entramos a la Ruta de la Seda", como se conoce también este programa chino, informó el presidente de Colombia, Gustavo Petro, en un comunicado de su oficina después de una reunión con su homólogo, Xi Jinping.
Petro aseguró que esta iniciativa "cambia la historia de nuestras relaciones exteriores", según dijo en la red social X al comentar un video de su canciller, Laura Sarabia, suscribiendo el acuerdo.
"A partir de ahora Colombia se relaciona con el mundo entero en pie de igualdad y libertad", afirmó el mandatario.
Petro aseguró que la entrada a las Nuevas Rutas de la Seda permitirá reducir los 14.000 millones de dólares de déficit comercial con China y revitalizar la zona del Litoral Pacífico colombiano, desde donde abrieron en febrero una conexión marítima con Shanghái.
La cancillería colombiana se felicitó por la firma del acuerdo que definió como "un paso histórico que abre nuevas oportunidades de inversión" entre ambas naciones.
La agencia de prensa estatal Xinhua confirmó el acuerdo y precisó que “los dos jefes de Estado asistieron a la firma de un plan de cooperación entre los dos gobiernos para construir conjuntamente el Cinturón Económico de la Ruta de la Seda y la Ruta Marítima de la Seda del Siglo XXI".
El presidente chino instó a ambos países a "aprovechar la oportunidad de la adhesión formal de Colombia a la familia de la Iniciativa de la Franja y la Ruta para promover una mayor calidad en su cooperación", según este medio.
Dos tercios de los países de América Latina se suscribieron ya a este proyecto central en la estrategia del presidente Xi para expandir la influencia económica y política de China.
En una cumbre con la Celac celebrada la víspera en Pekín, Xi se ofreció como socio fiable en tiempos de "confrontación" y "proteccionismo", y prometió 9.200 millones de dólares en créditos para el desarrollo en América Latina y el Caribe.
Esta región ha sido uno de los principales objetivos de Pekín, que ya es el principal socio comercial de países como Brasil, Perú y Chile, y quiere ser un estandarte del multilateralismo, tal como el presidente Xi reiteró en un encuentro este miércoles con su par chileno, Gabriel Boric.
En Colombia, Washington se mantiene como principal socio comercial, pero las importaciones chinas ya superan las estadounidenses y el gigante asiático ha emprendido inversiones estratégicas como la construcción del metro de Bogotá.
En los últimos años, China ha ganado terreno frente a Estados Unidos como origen principal de las importaciones de Colombia. Entre 2014 y 2024 pasó del 18,4% al 24,9% del total, con 14.700 millones de dólares el último año, según cifras oficiales.
Y en enero y febrero de 2025, el valor de las importaciones de Colombia desde China superó al de las estadounidenses por primera vez desde la pandemia.
Estados Unidos compra por su lado el 30% de las exportaciones colombianas, según el presidente de la Asociación Nacional de Comercio Exterior, Javier Díaz.
El presidente estadounidense, Donald Trump, ya envió un mensaje a los países latinoamericanos cercanos a Pekín, al amenazar a Panamá con recuperar el canal interoceánico por una supuesta injerencia china en sus puertos. El país centroamericano no tardó en cancelar, en febrero, su adhesión al programa de la Franja y la Ruta.