Exsenador demócrata Bob Menéndez ingresó a prisión para cumplir su condena de 11 años por corrupción
Este martes 17 de junio, el exsenador demócrata de origen cubano Robert "Bob" Menéndez ingresó a una cárcel de Estados Unidos para cumplir una condena de 11 años por corrupción y cohecho.
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Menéndez, quien llegó a ser uno de los políticos más influyentes en Washington, fue hallado culpable de varios delitos luego de que la Policía allanara su vivienda en 2022 y encontrara más de 480.000 dólares en efectivo escondidos entre ropa, zapatos y una caja fuerte, así como 13 lingotes de oro valorados en 150.000 dólares y un auto descapotable Mercedes Benz.
De acuerdo con informes de la Fiscalía, "Bob el de los lingotes", como fue apodado, aprovechó su poder e influencia entre 2018 y 2022 para ayudar junto a su esposa, Nadine Arslanian, a los empresarios Wael Hana, Fred Daibes y José Uribe -también declarados culpables- a conseguir favores y protección para sus negocios a cambio de sobornos.
En 2024, el exsenador de 71 años fue declarado culpable por un jurado popular de soborno, fraude, extorsión, obstrucción a la justicia y de recibir pagos para favorecer al gobierno egipcio y ayudar a un fondo de Catar. Su esposa de 58 años también fue declarada culpable en un juicio posterior.
La sentencia contra el excongresista, quien es hijo de inmigrantes cubanos llegados a Estados Unidos antes de la revolución, se conoció a enero de este año por parte de un juez que lo condenó a 11 años de prisión, sentencia que deberá cumplir en la cárcel de Schuylkill en la localidad de Minersville, Pensilvania, a unos 226 kilómetros al este de Nueva York, según informes oficiales.
Menéndez apeló la decisión judicial y solicitó permanecer en libertad bajo fianza mientras se resuelve la apelación, pero la jueza Alison Nathan denegó el pedido el 11 de junio.
Es de mencionar que el exsenador fue el latino que más alto había llegado en la política de Estados Unidos, antes de que Marco Rubio fuera nombrado secretario de Estado por el presidente republicano Donald Trump.