El país sudamericano en el que EE. UU. quiere instalar oficinas "estratégicas" de Seguridad Nacional en medio de despliegue militar en el Caribe
Estados Unidos está interesado en montar oficinas de su departamento de Seguridad Nacional en instalaciones "estratégicas" de un país sudamericano.
La nueva iniciativa del Gobierno del presidente estadounidense Donald Trump se da en medio de un despliegue militar ordenado hace más de dos meses en el Caribe y el Pacífico Oriental donde, además de hacer presencia con varios elementos militares, ha abatido a varios presuntos narcotraficantes con el bombardeo a alrededor de unas 15 embarcaciones.
Para seguir adelante con esa misión, con la que Washington busca hacer frente a los carteles de la droga de la región, incluido el Cartel de los Soles, que asegura es una organización terrorista encabezada por la cabeza del régimen venezolano, Nicolás Maduro, decidió ahora tramitar la instalación de oficinas en un territorio aledaño.
Se trata de Ecuador, en donde, para que Estados Unidos pueda llevar adelante dicha iniciativa, los ecuatorianos deberán primero aprobar, en un referendo convocado para el 16 de noviembre, si permiten la instalación de bases extranjeras en su territorio, algo que está prohibido en la Constitución desde 2008.
La secretaria estadounidense de Seguridad Nacional, Kristi Noem, visitará Ecuador este miércoles y jueves para dialogar con el presidente Daniel Noboa, con quien se reunió en julio en Quito. Ambos recorrerán los balnearios de Manta y Salinas, ubicados al suroeste y donde ya hay bases militares ecuatorianas.
Noem conocerá "instalaciones estratégicas" para "potenciales bases" del departamento de Seguridad Nacional, dijo la portavoz presidencial Carolina Jaramillo en rueda de prensa en Quito.
Ese departamento del Gobierno estadounidense protege al país de posibles amenazas y sus funciones abarcan, entre tanto, la prevención del terrorismo, el control fronterizo y la gestión migratoria.
En esas bases operarán "agencias de seguridad y defensa" de Estados Unidos y fuerzas policiales y militares de Ecuador a cargo de la lucha contra el crimen organizado, añadió la vocera.
El presidente Noboa, aliado del Gobierno republicano de Trump en la región, anunció el viernes que ambos países descartaron la idea de instalar una base militar estadounidense en islas Galápagos como parte de una ofensiva contra el narcotráfico en el Pacífico.
Manta acogió durante una década aviones estadounidenses para vuelos antidrogas hasta 2009, mientras que Salinas fue, junto a Baltra, parte de la estrategia militar de Washington en la Segunda Guerra Mundial. En ambos balnearios hay todavía instalaciones de las Fuerzas Armadas ecuatorianas.
Noboa también dejó saber a la opinión pública que Ecuador ha dialogado con Brasil para crear una Policía amazónica para combatir el crimen organizado en esa región.
En Ecuador, cabe resaltar, operan una veintena de organizaciones narcotraficantes locales con nexos con carteles internacionales, de acuerdo con varias investigaciones.
Debido a la guerra por el poder entre las mafias, Ecuador es una de las naciones más violentas de Latinoamérica. En los últimos seis años los homicidios se dispararon más del 600%.