Los casos de deportistas que se convirtieron en empresarios exitosos: dos colombianos acompañan en prestigiosa lista a Cristiano Ronaldo y Michael Jordan

La vida deportiva muchas veces es corta. Algunos deportistas se tienen que retirar antes de los cuarenta años, pues no todos logran mantenerse en forma o financieramente estables. Pero algunos van garantizando su vida más allá del juego. Con una visión emprendedora, crean sus propias marcas o hacen inversiones inteligentes: pasan de ser ídolos deportivos a magnates comerciales.
Uno de estos casos lo protagoniza el deportista más distintivo de la NBA, Michael Jordan, que terminó su carrera con 32.292 puntos. Es un ícono del baloncesto que convirtió su marca personal en un mercado mundial. Gracias a su alianza con la marca deportiva Nike y la creación de los Air Jordan, Jordan pasó de ser una estrella deportiva a ser un multimillonario. Hoy cuenta con participación en equipos, restaurantes y con una línea de zapatos que se considera la más exitosa de todos los tiempos. Su fortuna se estima en 3.500 millones de dólares.
Reconocido por ser uno de los jugadores más reconocidos en el futbol colombiano, que cuenta con un aproximado de 162 goles durante toda su carrera, James Rodríguez actualmente también es un futbolista activo y empresario. Tiene su propia marca de agua mineral llamada 10Gold que vende aproximadamente 1,2 millones de botellas al año. Su patrimonio ronda en los 80 millones de dólares, pero parte de sus ingresos se van a la Fundación Colombia Somos Todos, que apoya a más de 250 niños en Ibagué.
LeBron James es otro caso brillante. Es un Jugador de la NBA, reconocido por ser uno de los mejores jugadores de baloncesto en la historia y por sus habilidades de pases y anotaciones. A través de su empresa SpringHill Company, produce contenido audiovisual, además de tener participación en cadenas de comida, acciones en Liverpool FC y otras marcas. Su fortuna ya supera los mil millones de dólares.
El exciclista Rigoberto Urán, deportista colombiano reconocido por su particular forma de ser y por sus múltiples logros, entre ellos ganar la medalla de plata en los Juegos Olímpicos Londres 2012, es otro buen ejemplo. Sorprendió en el 2014 en su incursión al mundo empresarial con su marca propia Go Rigo Go, que maneja su línea de prendas para los atletas del ciclismo y cuenta con sedes en Bogotá, Medellín y Cali.
Serena Williams, famosa por tener alrededor de 858 victorias en su carrera y haber dominado el tenis, construyó una marca poderosa como inversionista. Tiene su propia firma de capital de riesgo, Serena Ventures, que ha invertido en más de 60 startups lideradas por mujeres y personas racializadas. Su influencia va mucho más allá de la cancha. Se estima que su patrimonio es de 340 millones de dólares.
Por último, pero no menos importante está el caso de uno de los futbolistas más disciplinados de todos los tiempos, Cristiano Ronaldo, quien es reconocido por sus múltiples logros, entre ellos ser el máximo goleador internacional con 136 goles marcados en 219 partidos. Construyó su propia marca personal, conocida como CR7 Lifestyle y CR7. Cuenta con una cadena de gimnasios, negocios en el sector hotelero, su propia línea de perfumes y participación en distintas empresas. Su patrimonio gira alrededor de los 1.450 millones de dólares, lo que lo ubica en uno de los deportistas más ricos del mundo.
Asimismo, estos deportistas entendieron que la fama es un activo y lo transformaron en capital. Ya no se trata solo de competir y ganar, sino de trascender más allá de lo deportivo, como persona, marca, empresa y legado.