Confirman la presencia de agua congelada dispersa alrededor de sistemas planetarios como el nuestro

Gracias a observaciones del telescopio espacial James Webb, astrónomos lograron confirmar por primera vez la presencia de hielo de agua cristalina en un disco de escombros que orbita una estrella similar al Sol, ubicada a 155 años luz de distancia.
El estudio, cuyos resultados fueron publicados esta semana en la revista Nature, se basa en datos espectrales detallados, confirmando no solo la presencia de hielo de agua, sino específicamente de hielo de agua cristalina, similar al encontrado en los anillos de Saturno y en el Cinturón de Kuiper de nuestro sistema solar.
El telescopio espacial Spitzer de la NASA ya había sugerido en 2008 la posibilidad de agua congelada en este sistema, pero fue gracias al James Webb que se pudo confirmar de manera definitiva.
El sistema estelar en cuestión, catalogado como HD 181327, es significativamente más joven que nuestro Sol, con una edad estimada de 23 millones de años en comparación con los 4.600 millones de años de nuestra estrella.
La observación del Webb también reveló una amplia área libre de polvo entre la estrella y su disco de escombros, similar a la estructura del Cinturón de Kuiper en nuestro sistema solar.
Los astrónomos descubrieron además que el agua congelada no está distribuida uniformemente. En las partes más frías y lejanas del disco, hay más del 20% de agua en forma de hielo, mientras que hacia el centro, esta cifra disminuye a aproximadamente 8%.
En las áreas más cercanas a la estrella, el hielo de agua prácticamente desaparece, probablemente debido a la vaporización causada por la estrella.
Este descubrimiento abre nuevas vías para estudiar la formación de planetas y la distribución de materiales helados en sistemas planetarios en toda la Vía Láctea.