Tercer juez de caso Bolsonaro difiere con los dos primeros veredictos y vota para absolver al expresidente de presunto complot golpista
El juez de la Corte Suprema de Brasil, Luiz Fux, votó el miércoles para absolver al expresidente Jair Bolsonaro de un presunto intento de golpe de Estado y anular su juicio sobre jurisdicción, rompiendo con sus pares y elevando las probabilidades de una apelación de un veredicto esta semana.
Bolsonaro es acusado de participar en una organización criminal armada, intentar abolir violentamente la democracia, organizar un golpe de Estado y dañar la propiedad gubernamental y los bienes culturales protegidos.
Dos jueces del panel de cinco votaron para condenarlo y los dos restantes fueron designados por el actual presidente Luiz Inácio Lula da Silva, quien venció a Bolsonaro en las elecciones de 2022.
El voto de Fux, sin embargo, podría reforzar el argumento de la defensa de Bolsonaro a cerca de que el caso debe ser decidido por el pleno del Tribunal Superior, compuesto por 11 jueces, incluidos otros dos que fueron designados por el expresidente.
La divergencia en la corte agrega tensión a un caso que ya ha polarizado a la nación y llevado a miles de partidarios de Bolsonaro a las calles en protesta.
Un largo proceso de apelación también aproximaría los procedimientos a la campaña presidencial de 2026, en la que Bolsonaro afirma ser candidato.
Al expresidente se le prohibió postularse en un caso aparte por supuestamente difundir afirmaciones infundadas sobre el sistema de voto electrónico de Brasil.
Los cargos están específicamente relacionados con la presunta incitación de Bolsonaro a disturbios en enero de 2023, cuando miles de sus partidarios irrumpieron y saquearon el Congreso, el palacio presidencial y la Corte Suprema en Brasilia.
Sus abogados han mantenido su inocencia en todos los cargos y argumentaron que su juicio involucró varios errores de procedimiento.
"No tuvimos acceso a las pruebas y mucho menos tiempo suficiente para revisarlas", sostuvo la semana pasada al tribunal Celso Vilardi, abogado del expresidente.
El juez coincidió el miércoles con varios de los argumentos de la defensa. En su voto durante las deliberaciones finales del juicio, Fux afirmó que el caso debería haber sido visto en tribunales inferiores debido a que Bolsonaro había dejado el cargo.
"Voto... que la Corte Suprema no tiene jurisdicción para juzgar este caso porque los acusados ya habían perdido sus cargos (políticos)", aseveró Fux.
Fux también validó que la defensa no tuvo tiempo suficiente para preparar su caso y señaló que la investigación generó alrededor de 70 terabytes de documentos, lo que llamó un "tsunami de datos".
"No soy un experto en la materia, pero el volumen alcanzó los 70 terabytes; no lo podía creer, porque son miles de millones de páginas. Sin embargo, fue recién el 30 de abril de 2025 que se emitió la decisión de permitir el acceso a los medios y al material incautado durante la fase de investigación", señaló.
La jueza fue designada para el tribunal por la expresidente Dilma Rousseff, aliada cercana de Lula y sucesora elegida cuando terminó su segundo mandato en 2010.
Fux todavía tiene que votar sobre otros acusados antes de que la jueza Carmen Lucía comience su votación.