
La pandemia del covid-19 provocó el aumento del envejecimiento cerebral prematuro
Una investigación adelantada por expertos de la Universidad de Nottingham, en Reino Unido, reveló que la pandemia del covid-19 tuvo un impacto en la salud cerebral de los seres humanos, incluso en personas que no sufrieron afectaciones directas por esta enfermedad.
Las principales causas de esta afectación, según los investigadores, se deben al estrés y el aislamiento al que nos vimos sometidos durante aquella época.
En el estudio que se realizó a un aproximado de mil personas, se evidenció que las aquellos que atravesaron la pandemia demostraron envejecimiento cerebral acelerado en comparación con análisis realizados antes de que esta crisis afectara a la mayor parte de la población mundial.
Esta investigación también detalló que el deterioro del cerebro fue más evidente en hombres y en aquellas personas que vivían en entornos más vulnerables. “Este estudio nos recuerda que la salud cerebral se ve afectada no solo por la enfermedad, sino también por nuestro entorno cotidiano”, expresó Dorothee Auer, autora principal de este estudio.
Para este estudio, los expertos hicieron uso de modelos de aprendizaje automático y resonancias magnéticas cerebrales que fueron extraídas de Biobanco del Reino Unido. Por medio de estos modelos se calculó la edad real de las personas con el estimado del cerebro, lo cual arrojó como resultado la existencia de una “brecha de edad cerebral”.
En este análisis participaron 996 personas. Se evidenció que 432 de ellas, a quienes se les practicó resonancia antes y después de la pandemia, reflejaron un envejecimiento cerebral promedio de 5,5 meses más rápido, en comparación con los otros 564 participantes, a los cuales se les había hecho resonancia dos años antes de la crisis sanitaria que puso en pausa la vida de la mayor parte de la humanidad.
Durante este estudio se observó que el aceleramiento de la atrofia cerebral fue más evidente en los pacientes que padecieron la enfermedad del Covid-19 a medida que avanzaba su edad. Sin embargo, también se reflejó un deterioro significativo en aquellos que no padecieron este diagnóstico, según el director del estudio, Ali-Reza Mohammadi-Nejad.
Frente a esto, los investigadores expresaron que aún es un análisis con varias limitaciones, esto teniendo en cuenta que hasta el momento no se ha logrado determinar si la duración de estos efectos es temporal o permanente y que faltan estudios globales para tener datos más concretos.